Los Denver Nuggets tienen el lunes la cita más importante de su historia. Con un triunfo ante su público, el equipo de Nikola Jokic se coronará por primera vez campeón de la NBA pero para ello tendrá que batir a unos Miami Heat que se crecen en la adversidad.
En sus primeras Finales en 47 años en la liga, Denver tiene una cómoda ventaja de 3-1 que refleja su dominio sobre los Heat de Jimmy Butler, a los que parece haberles abandonado las fuerzas en el momento decisivo de sus sorprendentes playoffs.
Jokic, un pívot con un talento único para asistir a sus compañeros, ha dirigido con maestría una orquesta minuciosamente afinada por un técnico, Michael Malone, y una dirección deportiva que trabajan al unísono desde hace ocho años.
Las estadísticas invitan a pensar que los Nuggets culminarán con éxito su fabulosa temporada, en la que lograron el primer lugar de la Conferencia Oeste y despacharon sin mayores problemas en las eliminatorias a los Timberwolves de Karl-Anthony Towns (4-1), los Suns de Kevin Durant (4-2) y los Lakers de LeBron James (4-0).
De los 36 equipos que se vieron 3-1 abajo en unas Finales únicamente uno fue capaz de alcanzar el anillo. Esa gesta fue protagonizada en 2016 por el propio LeBron James y sus Cleveland Cavaliers ante los todopoderosos Golden State Warriors de Stephen Curry.
Los Heat, el equipo que nunca se rinde, no quiere renunciar a repetir una hazaña que está todavía muy presente en la memoria de aficionados y jugadores de la NBA. Tan viva está que todavía puede ser relatada a sus compañeros de Miami por el veterano ala-pívot Kevin Love, quien era socio en aquel entonces de LeBron en Cleveland.
– “No es imposible” –
“Podemos hacerlo. Hay cosas que corregir, obviamente, pero no es imposible”, recalcó el viernes Jimmy Butler, la estrella de los Heat, minutos después de que perdieran el segundo partido seguido en su cancha por 108-95.
Miami, franquicia campeona de tres anillos, ha hecho honor en estos playoffs al espíritu de lucha implantado por su legendario presidente, Pat Riley.
Aunque llegaron a las Finales en 2020 y estuvieron a un paso de repetir dos años después, esta vez no había prácticamente quien apostara por ver a Miami de nuevo en estas alturas.
Los Heat sacaron un agónico boleto a playoffs en el segundo partido del repechaje y a partir de ahí fueron destruyendo pronósticos.
Primero eliminaron a los Milwaukee Bucks de Giannis Antetokounmpo (4-1), el mejor equipo de la fase regular, luego a los New York Knicks (4-2) y finalmente a los Boston Celtics (4-3), los vigentes subcampeones.
Los Heat fueron el segundo equipo en alcanzar unas Finales partiendo como octavo sembrado y aún creen que pueden ser el primero que alcance el anillo.
“Somos un grupo increíblemente competitivo”, recalcó el prestigioso técnico de Miami, Erik Spoelstra. “Todo lo que hemos logrado era difícil y así va a tener que ser ahora. Nos tenemos que concentrar en regresar vivos a Miami (para un sexto juego) y entonces las cosas pueden cambiar muy rápido”.
– Un equipo a fuego lento –
En Denver, el técnico Michael Malone se esfuerza en que sus jugadores no caigan en un exceso de confianza y culminen la misión de ganar para la ciudad el anillo que se les escapó a sus anteriores leyendas, como Carmelo Anthony o Alex English.
El título coronaría a un equipo forjado a fuego lento, que adquirió a sus líderes en Drafts donde no contaba con las primeras elecciones y los desarrolló para compenetrarse a un nivel que está fascinando a la liga.
Jokic, la joya que descubrieron en el puesto 41 del Draft de 2014, ha ganado dos premios MVP de temporada y ya acaricia el galardón de mejor jugador de estas Finales, en las que está promediando un estratosférico promedio de 30,8 puntos, 13,5 rebotes, 8 asistencias y 1,5 tapones por juego.
Jamal Murray, elegido en el séptimo lugar en 2016, se ha confirmado como estrella de una liga que aún no lo ha considerado para jugar un All-Star Game.
El base canadiense ha vuelto a lo grande después de perderse toda la temporada pasada por una grave lesión y tiene una media de 23,3 puntos y 10,5 asistencias en estas Finales, una combinación que nadie lograba en esta instancia desde Magic Johnson.
Michael Porter Jr., seleccionado en el puesto 14 en 2018, ha dejado su rol de tercera espada en las Finales a Aaron Gordon, uno de los grandes aciertos de Denver en el mercado de fichajes.
De la mano de todos ellos, los modestos Nuggets quieren ser tachados el lunes de la lista de 11 equipos sin anillo.
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