La situación actual entre la dirigencia brumosa y los directivos manuda está al rojo vivo, los acontecido en la gran final con los camerinos, además de la situación actual con el artillero cubano Marcel Hernández, han causado que las relaciones entre ambos equipos empezaran a deteriorarse.
Por una parte, los rojinegros acusaron de a Cartaginés por acciones que no son de juego limpio, como cortarle el agua en el camerino al Alajuelense, a lo que el presidente brumoso Leo Vargas comentó que fue falla meramente del Fello Meza.
“Me preguntaron sobre lo que pasó con el agua en el Fello Meza y no tuvimos nada que ver, nosotros no cortamos el agua, porque son instalaciones viejas y no puedo cortar solo a un sector, si se quitaba era a árbitros y a los dos camerinos, tanto el nuestro como el del visitante”, comentó Leonardo Vargas, presidente del Cartaginés.
Por otra parte, en la visita al Alejandro Morera Soto, los brumoso sufrieron un apagón en su camerino y les encendieron los aspersores a los porteros en el calentamiento. Estas situaciones generaron roce en la relación entre los equipos y su junta directiva.
Vargas recalcó que nunca hubieron reclamos, pero sabe que la situación con los manudos no es la mejor ya que esto nunca había pasado entre ambos.
“En Alajuela sí pasaron cosas que molestaron mucho y aún así no dije nada. Se tocaron cosas que no pasaban entre estos dos equipos, pero departe del Cartaginés no existe ninguna revancha con Alajuelense. Después de muchos años nos tocó ganar, lo estamos festejando y no pasó nada, pero del rival no tenemos nada que decir, porque los vencimos de buena manera”, agregó el presidente.
La novela aún no termina, pues todavía queda por resolverse el tema de Marcel Hernández quien todavía tienen un futuro incierto y depende de ambas directivas llegar a un acuerdo por el jugador.