El cuarto favorito italiano no se inmutó al perder su primer set del torneo contra el rey del Rod Laver Arena, ganando la semifinal por 6-1, 6-2, 6-7 (6/8), 6-3.
Se enfrentará al tercer favorito ruso Daniil Medvedev o al alemán sexto favorito Alexander Zverev en el partido por el título del domingo, lo que significa que habrá un nuevo nombre en el trofeo.
El diez veces campeón Djokovic luchó contra un punto de partido en el tie-break del tercer set, pero cometió 54 errores y no logró crear un solo punto de quiebre en una actuación por debajo de su nivel estelar.
“Fue un partido muy duro”, dijo Sinner. “Comencé muy bien. Falló en los dos primeros sets. Sentí que no se sentía muy bien en la cancha, así que traté de seguir presionando.
“Luego, en el tercer set, tuve un punto de partido y fallé el golpe de derecha, pero esto es tenis. Sólo traté de estar listo para el siguiente set, que comencé muy bien”.
Sinner, de 22 años, dijo que sentía que había aprendido de la derrota ante Djokovic en las semifinales de Wimbledon del año pasado (lo más lejos que había llegado anteriormente en un Grand Slam) y que esperaba con ansias el partido.
“Creo que jugamos muy similar: hay que devolver tantas pelotas como sea posible, él es un sacador increíble”, dijo. “Así que sólo estaba tratando de presionarlo un poco; no les voy a decir las tácticas”.
– Puja récord de Djokovic –
Djokovic, que no había probado la derrota en el Abierto de Australia desde 2018, careció de su habitual consistencia metronómica cuando el genial Sinner tomó una ventaja de 3-0.
El italiano volvió a quebrar en el sexto game y se apoderó del primer set cuando Djokovic se fue largo con un golpe de derecha.
El conteo de decibelios en la cancha central aumentó al comienzo del segundo set y Djokovic, de 36 años, se calmó con un agarre convincente.
Pero su cuenta de errores siguió aumentando y Sinner, que había vencido a Djokovic en dos de sus tres encuentros anteriores, rompió el quiebre en el tercer juego para establecer un control del partido.
Djokovic instó a la multitud a acudir en su ayuda y gritos de “Nole” resonaron en el estadio lleno, pero volvió a quebrarse y cayó dos sets.
El partido se detuvo en 5-5, 40-40 en el tercer set mientras el personal médico atendía a un aficionado entre la multitud, pero Djokovic hizo caso omiso a la interrupción para mantener el servicio y enviar el partido a un tie-break.
El serbio se adelantó, pero Sinner regresó para ganar su primer punto de partido, solo para lanzar un golpe de derecha a la red.
Djokovic no cometió ningún error cuando se le presentó la oportunidad de sellar el set, levantando el puño cerrado hacia la multitud.
Pero el servicio del serbio volvió a estar bajo nueva presión en el cuarto set y se rompió para darle a Sinner una ventaja de 3-1.
El italiano mantuvo los nervios y forjó un segundo punto de partido, 55 minutos después del primero, con un golpe de derecha ganador para obtener la victoria después de tres horas y 22 minutos y poner fin a una era en Melbourne Park.
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